“Luz, ruido, temperatura y alimentación son claves en el sueño del bebé”

Con motivo del Día Mundial del Sueño, que se conmemora cada 15 de marzo, el programa Gestiona tu salud, de la periodista Sandra Gallard, en Radio Intereconomía, entrevistó al Phd. Tomás Zamora, coordinador e invetigador del Instituto Europeo de la Calidad del Sueño, ESCI, y coautor junto al Dr. pediatra, Gonzalo Pin, de la Guía del Sueño Infantil, editada por el Instituto y accesible gratuitamente desde nuestra página web.

En la entrevista, Tomás Zamora, explica la importancia de la calidad del sueño en el bebé porque cuando duermen terminan de madurar los sistemas más complejos, como el sistema nervioso central. Por este motivo deben dormir bien y adecuadamente. “Es un mecanismo esencial y es necesario prestar atención al entorno en el que duerme el bebé”, señaló.

En los tres primeros meses de vida un bebé duerme entre 12 y 18 horas. Hay varias recomendaciones para que el bebé concilie el sueño y están relacionadas con la luz, alimentación, ruido o temperatura.

Según Zamora es importante que el bebé no esté expuesto a luz brillante antes de dormir, porque la luz es una gran estimuladora de la vigilia, y tenemos que ayudarles a diferenciar el día y la noche porque no saben diferenciarla. Otra recomendación tiene que ver con la lactancia materna, ya que a través de la leche de la madre, el bebé incorpora el reloj circadiano de su madre, que le permite, precisamente, aprender esa diferencia.

Es importante que el bebé no esté expuesto a luz brillante antes de dormir porque la luz estimula la vigilia

Otro aspecto clave es la temperatura porque para dormir bien nuestro cuerpo tiene que termorregular perfectamente, sin exceso de frío o de calor. Si no lo permitimos, porque tapamos demasiado al bebé o si le hacemos pasar frío, el sueño será más superficial. En la adolescencia la temperatura ambiente, también guarda mucha relación con la profundidad del sueño.

A través de la leche materna el bebé incorpora el reloj circadiano de su madre y aprende a diferenciar el día de la noche

Y finalmente la superficie de descanso del bebé es más importante de lo que a priori puede parecer. Aporta seguridad si es capaz de disipar un exceso de temperatura, si tiene una alta porosidad que permita respirar al bebé en caso de que se voltée, o si incorpora un diseño que previene la plagiocefalia postural, motivada por la recomendación adecuada de que el bebé duerma boca arriba para prevenir la Muerte Súbita del Lactante.

Si quieres escuchar la entrevista completa solo tienes que pinchar este enlace e ir al minuto 26:09 donde comienza la entrevista sobre el sueño en el desarrollo del bebé.